acuarela de Willem Haenraets.
Hay un instante oculto en cada poro de este día.
En lo más pequeño de las cosas cotidianas.
Un momento único reconciliándose
con el agua pura de lo sencillo.
Busco refugio en la desnudez de la quietud,
donde la sombra del tiempo muere.
Quizá sea ahí donde las certezas se muestran puras,
en la inercia de todas las rutinas.
Anochece
y los sueños quedan suspendidos.
-Irma Diksha Ruffa.
...Los sueños quedan suspendidos.
ResponderEliminarBonitas palabras Delia. Y preciosa imagen en su colorido...
Realmente muy delicada.
EliminarEste poema me encantó desde su comienzo, desde esa mención al instante oculto tan cerca y accesible en cada momento del día.
EliminarUn abrazo.