A medida que las estructuras van cayendo nos damos
cuenta que es el asentimiento el que que arrasa con ellas,
no cualquier asentimiento sino el que acepta a todo tal
cual es.
En ese nivel asentir es amar y amar es asentir, las
construcciones mentales son superadas por el
discernimiento: lo real se impone y lo ilusorio se
desvanece.
La aceptación de lo que es! Soy fan de este "single" :)
ResponderEliminarUn abrazo amiga!
Asentir es amar y amar es asentir desde la aceptación a todo cual es. Tan claro como el agua cristalina. Gracias Delia!
ResponderEliminarSi me permites me gustaría llevarlo al blog.
Un fuerte abrazo.