28 de diciembre de 2013
En el espacio del corazón.
En el centro de nuestro ser existe una habitación que invita a la oración sosegada y
silenciosa (MATEO 6,6), una sala amplia, dispuesta y preparada para celebrar la
Pascua (MARCOS 14,14), una cámara nupcial donde se consuma la boda de Caná
entre el Esposo y la Novia (JUAN 2,2). También es el albergue que acoge el
nacimiento del niño Dios (LUCAS 2,7).
En los textos sagrados de las Upanishads védicas a este sancta sanctorum se le
denomina hiridaya akásha: "el espacio del corazón". Este espacio trasciende
cualquier coordenada geográfica, más allá de todos los paralelos y meridianos
humanos, pues no se encuentra aquí ni allí sino que extiende su glorioso reino
por todas partes, invisible a los ojos del mundo. Paradójicamente este "no lugar"
se abre de manera nítida y precisa en el centro de nuestro corazón, pero al igual
que le aconteció a Jacob de camino a Jarán, dormimos y soñamos profundamente
sin percatarnos de que nuestros latidos, tan ignorados por cotidianos, son la
invocación perenne de esta akásha que nos sostiene y crea en permanencia, pués
"Yo me encuentro en el corazón de todos los seres" (BHAGAVAD GITA 15,15).
Sólo al rayar el alba, en el solsticio de nuestra consciencia, despertaremos y
exclamaremos llenos de asombro:-"Así pués, está Dios en este lugar y yo no lo
sabía!...!Esto no es otra cosa sino la casa de Dios y la puerta del cielo"-
(GENESIS 28, 16-17)
-Marco Giovannucci.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Si. Sincronicamente, si.
ResponderEliminarAmelia un gran abrazo en esa sincronía.
EliminarMuchas gracias , está tan cerca y no lo vemos , es cerrar los ojos sentirlo y el corazón se llena de gozo
ResponderEliminarGracias por acercarme a El
Felices días
Arianna lo mismo a tí.
EliminarFelicidades!
Así sucede... así sucederá!
ResponderEliminarUn abrazo Delia.
Si Ernesto, así es. Quise dejar un comentario en tu aclaración sobre los nombres y no pude así que te lo dejo ahora: Carlos, Ernesto o ....sólo son las formas y ya sabemos que aparecen, cambian y desaparecen, el encuentro permanece ese acertado saludo ! NAMASTE!.......
EliminarUn abrazo y feliz año!!!!
Gracias Delia.
ResponderEliminarGracias por encontrarnos siempre, querida Georgina.
Eliminar